Pues todo esto ha sido ya objeto de consideraciones anteriores. Igualmente, todo acto aislado de voluntad de un individuo consciente (el cual sólo es manifestación de la voluntad como cosa en sí) acusa necesariamente un motivo sin el cual el acto no se produciría; pero, así como la causa material no contiene más que la determinación de que en tal momento, en tal lugar y en tal materia debe aparecer una manifestación de esta o aquella fuerza natural, el motivo no determina tampoco más que el acto voluntario de un sujeto que conoce en un momento, lugar o circunstancia determinados y para cada acto en particular, pero no la volición de este individuo en general ni siquiera de un modo determinado, esto es, la manifestación de su carácter inteligible, el cual, como la voluntad misma, la cosa en sí, carece de causa por estar situada fuera del dominio del principio de razón.
Tema
Tema
Texto