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El complejo de Edipo - tipo afectuoso
Cuando un niño tiene entre los tres y cinco años, ocurre el desarrollo psicosexual, produciendo una modificación en la conducta del niño.
Lo que ocurre es que el niño empieza a sentir amor por su madre, pues ahora tiene una visión idealizada de ella.
Esto puede llegar a significar que el niño quiera tomar ‘posesión’ de su madre y teme que otro le quite su atención. Por ello, normalmente, se crea una gran rivalidad principalmente con el padre.
“Soy quien más te quiere en el mundo”
“El novio de mami soy yo, no tú’’
Si un niño no logra superar el Complejo de Edipo en su infancia (años 1 a 6) en la pubertad el tema puede volverse más complicado y difícil de ligar. Esto es debido a que el adolescente en la pubertad pasa por dos etapas psicosexuales y percibe el mundo de otra manera. Las etapas por las cuales pasa el adolescente son:
El complejo de Electra
El complejo de Electra es la versión femenina del complejo de Edipo, es decir, la niña siente un cariño especial por su padre y se separa de la madre, pues la considera que está compitiendo contra ella por la atención de su padre.
Sin embargo, hay algunos psicólogos que consideran que el complejo de Edipo es válido para ambos sexos, pues tanto las niñas como los niños pasan por el mismo desarrollo. Pero, para lograr un estudio más específico de cada uno, se tiende a separar en el complejo de Edipo y el complejo de Electra.
El rival:
El padre del niño se vuelve ahora su competidor, pues ambos (según el niño) se encuentran peleando por el cariño de la madre. Para poder ‘ganar esta batalla’, el niño tiende a quedarse pegado a su madre en todo momento, volviéndose sumamente posesivo, porque, claramente, quiere también llamar su atención. A parte, buscan tenerla siempre contenta, pero que quede claro; él es la razón de su felicidad. Por ejemplo; se portan bien, le dan regalos hechos a mano, le escriben cartas etc.
En cambio, mientras que a la madre la ponen en un altar, lo único que quieren hacer con el padre es lograr que se enfade. Estos sentimientos se expresan por medio de rabietas y desobediencia, demostrando que no quieren saber nada con el padre porque le está quitando a su madre.
Es por esto que en la mayoría de los casos es el padre quien detecta el comportamiento del niño ya que la madre puede considerar el cambio de comportamiento como una forma más en la que le está demostrando su cariño.
Muchos llamamos ‘’mamitis’’ a este comportamiento.
El complejo de Edipo se puede dividir en dos sub-tipos debido a que hay el Complejo de Edipo relacionado a la atracción sexual, y el Complejo de Edipo relacionado al afecto característico de la madre. Así mismo, esto también ocurre cuando una niña siente el mismo sentimiento hacia su padre, pero este recibe el nombre del Complejo de Electra.
El complejo de Edipo relacionado al afecto consiste en la idealización de la madre y la ''batalla'' por su amor contra el padre - ''mamitis''
Con respecto a la atracción sexual, el complejo se puede dividir en:
-La Etapa Oral: Sigmund Fredu describe esta etapa como la primera sobre el desarrollo del complejo de Edipo en un niño ya que esta se relaciona con el afecto que siente un niño hacia la madre. Esto es debido a que esta etapa ocurre dentro del periodo de lactancia de un niño y según Freud el niño crea un vinculo con la madre por medio de los nutrientes que ella le da al darle de lactar.
- La Etapa Anal: Esta es la segunda fase por la que pasa un niño con el complejo y esta ocurre entre los 2 y 4 años. En esta fase la atención del niño pasa del periodo de lactancia o de la etapa oral a poder controlar su ¨area anal¨ y decidir cuando defecar y cuando no. Según Freud esta fase se basa en ¨la excitación que un niño tiene al poder controlar sus intestinos¨, lo que significa en otras palabras que el niño empieza a tomar sus propias decisiones y a controlar su propio cuerpo.
- Etapa Fálica: La tercera fase según Sigmund Freud en el complejo de Edipo por la cual un niño pasa. Esta etapa ocurre entre los 3 y 5 años del niño y en ella el niño es más perceptible a la sensibilidad en la parte del pene o miembros reproductivos en especial a la hora de hacer pila. Así mismo, en esta etapa Freud dice que se supera parcialmente y temporalmente el Complejo de Edipo (ya que puede ocurrir nuevamente en la pubertad y con mayor relación a la sexualidad) debido a el Complejo de Castración que ocurre en esta etapa. El complejo de Castración es el miedo hacia la perdida del órgano reproductor en los hombres por lo cual deciden despegarse amorosamente de la madre, así mismo en las mujeres, este complejo también ocurre ya que ellas a esta edad ven que no tienen un pene y deducen que han sido castradas por lo que inician un odio hacia su madre por esto y un amor hacia el padre al ellos tener el órgano que ellas no poseen; a esto también se le conoce como ¨la envidia del pene¨. En otras palabras, en esta etapa el complejo de Edipo termina (temporalmente en algunos casos) en los hombres y se inicia en las mujeres ya que se pegan amorosamente a su padre por tener un ¨falo¨.
Buscando a la madre en la pareja
En 1910, el psicoanalista Sigmund Freud salió con una teoría sobre como un niño puede sentirse atraído hacia uno de sus padres y la denominó El complejo de Edipo. Según Freud, el complejo de Edipo es ¨el deseo inconsciente de mantener una relación sexual con el progenitor del sexo opuesto y de eliminar la padre del mismo sexo¨ . Con esto se refiere a que un niño desea cometer incesto con uno de sus padres y parricidio con el otro. Además, según la teoría de Freud, el complejo se divide en tres etapas por la cuales el niño que sufre de este complejo, pasa a lo largo de su desarrollo psicosexual.
Las etapas son las siguientes ; Oral, Anal y Fálica ,que ocurren entre el primer año del niño hasta que este cumple los 6 años. Así mismo, Freud dice en su teoría que los niños que sufren aquel complejo luego en la pubertad el síndrome se ¨revive¨ con la diferencia que el niño puede escoger al padre del cual se sienta atraído (el complejo negativo y el complejo positivo) y en ese momento se inicia la ¨sexualidad adulta¨ del niño.
Entonces, la madre es la primera persona con la cual un niño desarrolla amor, pues, desde el embarazo, ya hay un vínculo creado. Para el niño, su madre es perfecta y por medio de ella, aprende todo sobre las mujeres y empieza a pensar que todas son como ella o que si no lo son, deberían serlo. Entonces, entendemos por qué cuando es hora de elegir una pareja, hay hombres que buscan a una mujer que se parezca a su madre, pues ya tienen ese ‘chip’ o un molde predeterminado. Esto no significa que busquen a una pareja que sea físicamente igual a su madre (aunque también hay casos) sino que busca que tenga, probablemente, una personalidad parecida, una forma de actuar parecida o el mismo carácter. Suele ser, si no, que busque la cualidad número uno de su madre en su novia.
Además, debido a que el niño contó siempre con la presencia de su ‘gran rival’, su relación amorosa con su madre es, de cierto modo, impedida. Por ello, cuando estos niños se vuelven adultos, busca, inconscientemente, a una mujer para poder tener la relación que no pudo tener con su madre, pues necesita satisfacer sus necesidades emocionales que perduran.
A lo largo de su adultez, estos hombres van de pareja en pareja en búsqueda de la ‘mujer perfecta’ y, lo que suele pasar es que el hombre se enamora de cualquier mujer a la cual la hayan determinado como ‘inalcanzable’, pues esto suele significar que es demasiado y por ello ‘perfecta’. Además, en muchos casos estos hombres ya tienen el molde de su madre totalmente establecido y por ello , al no encontrar a una mujer igual a su madre, no logran establecer una relación estable ni sentirse realmente completo.
En algunos casos, lo que ocurre es que el adulto no logra unir la sexualidad con el amor por lo que no logran ser esposos y amantes a la vez. Esto se debe al hecho de que la mujer de la que se haya enamorado debe ser, en este caso, parecida a su madre y por ello; perfecta; idealizándola con la idea de la pureza. Consecuentemente, suelen ser infieles.
Este tipo de comportamiento suele terminar de forma natural cuando el niño tiene más o menos 6 años y sin mayores problemas. Sin embargo, en algunos casos, cuando existen problemas entre los padres, este cambio en el comportamiento del niño puede hacer que la situación empeore. Por ejemplo, el niño va a aliarse siempre con su madre en contra de su papá (y por él feliz porque esto significa que él está ganando la pelea donde el amor de su madre está en juego), entonces, probablemente también procure hacer todo lo posible para que no se arregle el problema o hasta tratar de empeorarlo.