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Cumple con características y funciones similares a las del narrador en el género narrativo.
Y cuando asomas suenan todos los ríos en mi cuerpo, sacuden el cielo las campanas, y un himno llena el mundo. Sólo tú y yo, sólo tú y yo, amor mío, lo escuchamos.
(fragmento de “La reina”, Pablo Neruda)
Hablante lírico: un enamorado.
Corresponde a la realidad recreada a través del poema.
LIBRO hermoso, libro, mínimo bosque […]
(Fragmento de “Oda al libro”, Pablo Neruda)
Objeto lírico: el libro.
Corresponde a la emoción que manifiesta el hablante lírico a través del poema (dolor, serenidad, tristeza, felicidad, ira, y cualquier otro sentimiento o estado anímico).
Los vecinos (Bernardo González)
Corresponde a la manera en que el hablante se relaciona con los elementos presentados en el poema.
Margarita, está linda la mar
y el viento;
lleva esencia sutil de azahar
tu aliento.
(A Margarita. Rubén Darío)
No tienen estudios superiores
ni trabajo bien remunerado
han criado a sus hijos con dolor
pero andan tomados de la mano.
No tienen celular ni TV cable
rara vez van al supermercado
buscan su ropa en los baratillos
pero andan tomados de la mano.
No compran salud en las farmacias
porque beben toronjil cuyano
las monedas se las lleva el viento
ellos andan tomados de la mano.
El hablante se encuentra frente al objeto, describiéndolo o narrando experiencias relacionadas con él. Comúnmente, en esta actitud se utiliza la tercera persona.
Sólo sueñan con llegar a viejos
escuchando tangos en la radio
no desean sino vivir en paz
y pasear tomados de la mano.
No guardan rencores en el alma
comparten con Dios en un asado
un vaso de vino, un poco de aire
y bailan tomados de la mano.
Por toda propiedad tienen el sol
un libro, un pan, una higuera, un gato
no les alcanza la jubilación
pero andan tomados de la mano.
Como el tiempo sabe cuando llama
desmalezan lentamente el patio
es la dicha que no tiene precio:
descansar con flores en las manos.
Gracias a la vida que me ha dado tanto
me dio dos luceros que cuando los abro
perfecto distingo lo negro del blanco
y en el alto cielo su fondo estrellado
y en las multitudes el hombre que yo amo.
(Fragmento de “Gracias a la vida”, Violeta Parra)
El hablante se dirige a un receptor ficticio. Comúnmente, en esta actitud se utiliza la segunda persona.
Es la idea o concepto que cumple la función de tema del poema.
¡Cómo de entre mis manos te resbalas!
¡Oh, cómo te deslizas, edad mía!
¡Qué mudos pasos traes, oh, muerte fría,
pues con callado pie todo lo igualas!
Temple de ánimo: gratitud.
“Señor, tú sabes cómo, con encendido brío,
por los seres extraños mi palabra te invoca”.
(El Ruego. Gabriela Mistral)
Motivo lírico: El paso del tiempo y la muerte como destino de todos.
El hablante se refiere a sí mismo y expresa directamente sus sentimientos. Comúnmente hace uso de la primera persona.
Anoche, cuando dormía,
soñé, ¡bendita ilusión!,
que una colmena tenía
dentro de mi corazón;
y las doradas abejas
iban fabricando en él
con las amarguras viejas,
blanca cera y dulce miel.
Anoche, cuando dormía,
soñé ¡bendita ilusión!
que era Dios lo que tenía
dentro de mi corazón.
Determina el hablante, el objeto, el temple de ánimo y el motivo del poema “Anoche, cuando dormía…” de Antonio Machado.
Anoche, cuando dormía,
soñé, ¡bendita ilusión!,
que una fontana fluía
de mi corazón.
Di, ¿por qué acequia escondida,
agua, viene hacia mi,
manantial de nueva vida
en donde nunca bebí?
[…]
¿A qué actitud lírica pertenecen las siguientes estrofas?
“La tierra es dulce cual humano labio,
como era dulce cuando te tenía,
(G. Mistral)
Es la mañana llena de tempestad
en el corazón del verano.
Como pañuelos blancos de adiós viajan las nubes,
el viento las sacude con sus ligeras manos.
Poema 4 (Pablo Neruda)
No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
No te salves (Mario Benedetti)