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HOW
Mariana Celeste Caravaca, D.N.I Nº 36.970.727, abogada, Comisión 3.
La enseñanza es una práctica social y pedagógica compleja, determinada por múltiples factores que infliyen en la toma de decisiones del profesor y en las acciones que realiza. En estas decisiones y acciones intervienen tanto los conocimientos, valores, creencias e ideología del profesor como los condicionantes institucionales, socioeconómicos, culturales e históricos de ejercicio de su profesión.
El profesor posee diversos conocimientos profesionales que estructura en función de sus teorías y creencias personales.
Las creencias, valores y actitudes del profesor actúan a modo de "filtros" de aquellos conocimientos en las situaciones de enseñanza.
Las teorías personales de los profesores referidas a la enseñanza y los componentes didácticos pueden ser categorizadas en función de la coherencia que presentan respecto de las concepciones sobre el conocimiento, el aprendizaje, la metodología de enseñanza, la evaluación, la planificación, el uso de medios o recursos, la interacción docente-alumnos, la organización social de la clase, la función social de la escuela.
Constituyen los supuestos desde los que se entiende la ciencia, el método científico, la enseñanza y el aprendizaje de ambos.
Las teorías científicas son estructuras complejas y las denomina paradigmas, que funcionan como modelos conceptuales de interpretación de la realidad aceptados por las communidades científicos. El cambio científico es precedido por un profundo estado de crisis de paradigma dominante que desemboca en una revoluci´`ón científica, lo que da lugar al surgimiento de paradigmas alternativos de entre los cuales se impondrá aquel que consiga mayor adhesión entre los miembros de la comunidad científica.
Constituye una postura superadora, que evita reduccionismos y sitúa el análisis en un "macroconcepto original: la ecología intelectual" (Porlán, 1997:46).
Recoje las tradiciones positivistas y racionalistas para las cuales el conocimiento científico es verdadero, universal y ahistórico. Se trata de un "conocimiento jerarquizado". Dentro de esta perspectiva se distinguen dos posturas: la empírico-inductista y la racionalista. Para la primera el criterio de validación se asienta en los hechos. Para la segunda, en la teoría.
Distintas formas de entender la enseñanza. Integran las diversas concepciones acerca de la función social de la escuela, la enseñanza, el aprendizaje y el conocimiento. Constituyen modelos teóricos de interpretación de la denominada tríada didáctica y de los componentes didácticos- curriculares
Ve al docente como un ejecutor, una persona encargada de producir ciertos aprendizajes, y que utiliza para ello las mejores habilidades y técnicas disponibles.
Dentro de este enfoque son muy importantes los materiales curriculares cuidadosamente elaborados y la investigación sobre los efectos de la enseñanza.
Ve al docente como una persona empática encargada de ayudar a cada individuo en su crecimiento personal y a alcanzar un elevado nivel de auto afirmación, comprensión y aceptación de sí.
Ve al docente como un liberador de la mente del individuo y un promotor de seres humanos mortales, racionales, entendidos e íntegros.
Es un enfoque surgido del pensamiento neo-marxista contemporáneo, que busca emancipar a las personas comunes de las fuerzas económicas y políticas de la sociedad, que las mantienen oprimidas y apartadas de la plena igualdad.
La enseñanza se reduce a la transmisión de la cultura, más precisamente, de aquellos conocimientos que se consideran verdades permanentes.
Los contenidos están conformados por listados de temas, capítulos o unidades, en los que se organizan de manera exhaustiva y fragmentada para su posterior memorización por parte de los estudiantes.
El aprendizaje se produce por recepción pasiva de información suministrada principalmente por el docente y el libro de texto.
La estrategia de enseñanza dominante es la exposición o clase magistral.
La evaluación se concibe como una actividad terminal dirigida a la comprobación de resultados en términos de cantidad de información memorizada.
Expresa la aspiraciòn de hacer de la enseñanza una actividad científica, rigurosa y eficaz.
Se presenta como una alternativa "científica", la enseñanza deja de estar guiada por la intuición y la acción ejemplarizante del docente. Los valores ahora son la eficacia y la eficiencia, que se concretan mediante la adecuada organizaciòn de los medios disponibles. Lo importante es la planificaciòn detallada de los elementos a partir de la formulación exhaustiva de objetivos comportamentales, los que a su vez actúan como punto de referencia de la evaluación, que se reduce a la mediciòn del logro de tales objetivos.
La escuela se orienta al ajuste de la conducta individual y social a los requerimientos de la esfera económica, del mercado laboral y los cambios vertiginosos.
Se enmarca en los postulados de la Escuela Nueva, corriente pedagógica que considera que la educación prepara para la vida, se da en la vida y coloca al alumno en el centro de la reflexión. Sus principios son: actividad, libertad, individualidad, vitalidad, colectividad.
El aporte importante de este enfoque es situar al alumno en el centro de los procesos de enseñanza y aprendizaje y, a partir de ello, mostrar la disociación entre la vida escolar y la vida cotidiana, cómo los conocimientos que brinda la escuela carecen de significatividad para los estudiantes.
En la línea del pensamiento activo de la enseñanza la planificación es abierta y contextualizada.
La evaluación deja de ser un instrumento de calificación y sanción.
Constituye una propuesta alternativa a las limitaciones de los enfoques anteriores, los que al priorizar algunos de los componentes del sistema didáctico, no pueden dar cuenta de la totalidad ni de sus partes tal como actúan e interactúan al interior del sistema y en relación con el contexto externo.
Se asienta en concepciones te´óricas e ideológicas diferentes. Cada enfoque realiza aportes y presenta limitaciones.
La función de la educación es formar sujetos activos, creativos, autónomos, capaces de convivir democráticamente y de comprender el mundo circundante.
Intenta superar la disociación entre teoría y práctica en la enseñanza, y recuperar una visión de conjunto de los estructurantes del método didáctico sin caer en reduccionismos ni dicotomías.