Lo único que el cristianismo no pude ser es ser medianamente importante
El ayuno es la abstención voluntaria de alimentos con propósitos netamente espirituales; con el fin de buscar la presencia de Dios y la comunión con Él.
Ayuno y Oración deben ir unidos
¿Quiénes deben ayunar?
“y era viuda hacía ochenta y cuatro años; y no se apartaba del templo, sirviendo de noche y de día con ayunos y oraciones”. Lucas 2:37
Muchos cristianos creen que el objetivo del ayuno es sólo dejar de ingerir alimentos. Realmente, el propósito del ayuno debe ser apartar nuestros ojos de las cosas terrenales para concentrarnos en las cosas de Dios. Mediante el ayuno le expresamos a Dios lo serio que tomamos nuestra relación y nuestro compromiso con Él.
Todos podemos y debemos ayunar.
“Tocad trompeta en Sion, proclamad ayuno, convocad asamblea. Reunid al pueblo, santificad la reunión, juntad a los ancianos, congregad a los niños y a los que maman, salga de su cámara el novio, y de su tálamo la novia. Entre la entrada y el altar lloren los sacerdotes ministros de Jehová, y digan: Perdona, oh Jehová, a tu pueblo, y no entregues al oprobio tu heredad, para que las naciones se enseñoreen de ella. ¿Por qué han de decir entre los pueblos: ¿Dónde está su Dios?”. Joel 2:15-17
¿Qué dice la Biblia acerca del ayuno?
¿Cuáles son los diferentes tipos de ayuno?
1. Ayuno parcial
No comí manjar delicado, ni entró en mi boca carne ni vino, ni me ungí con ungüento, hasta que se cumplieron las tres semanas.
Daniel 10:3
Al apartar nuestros ojos de las cosas de este mundo, podremos enfocarnos más en Cristo. El ayuno no es una forma de lograr que Dios haga lo que queremos. El ayuno nos cambia a nosotros, no a Dios. No es una manera de aparecer más espirituales que los demás; es para vivir en espíritu de humildad y en actitud gozosa cada día.
¿Cuándo deberíamos ayunar?
Debemos ayunar en todo tiempo. El ayuno debe ser un estilo de vida. Hay gente que espera una guía de Dios, o sentir algo especial. Y sí, algunas veces el Espíritu Santo nos guía a hacerlo; pero nosotros también debemos tomar la iniciativa de ayunar.
La palabra de Dios presenta el ayuno como algo bueno, beneficioso y decisivo para alcanzar niveles espirituales superiores, donde los demonios no tendrán más remedio que someterse y salir huyendo. El libro de los Hechos registra que los apóstoles siempre ayunaban y oraban antes de tomar decisiones importantes.
¿Qué no es el ayuno?
Un ayuno parcial consiste de abstenerse parcialmente de ciertas comidas u horas de comida. Cuando usted se abstiene parcialmente de ciertos alimentos, deja de consumir eso que usted más disfruta por el tiempo que dure su ayuno. Por ejemplo, usted puede ayunar con vegetales y frutas, y deja de comer dulces, pan, arroz o carnes. Cuando usted ayuna parcialmente períodos de comida, es cuando usted elige comer una o dos comidas al día. También puede incluir en su ayuno la abstinencia de la televisión, ayune su televisión y, en lugar de eso, dedíquese a buscar la presencia de Dios.
Un ayuno total es cuando usted sólo bebe agua y líquidos. Hay gente en el cuerpo de Cristo que le tiene miedo al ayuno. Les preocupa llegar a desmayarse o morir. Pero sepa que su cuerpo tiene reservas suficientes para que usted aguante 40 días sólo con agua. Usted puede hacer un ayuno total de 14 días.
“Y constituyeron ancianos en cada iglesia, y habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído”. Hechos 14:23
El ayuno no es dejar de comer para perder peso. Abstenerse de comer porque el médico le dijo que no comiera, no es ayuno; tiene que haber un propósito espiritual para que se llame ayuno. Tampoco es ayuno el dejar de comer para hacer nuestra voluntad ni para satisfacer nuestros propios gustos. Si dejamos de comer, pero no dedicamos tiempo a la oración, tampoco hacemos mucho ante los ojos de Dios.