Introducing
Your new presentation assistant.
Refine, enhance, and tailor your content, source relevant images, and edit visuals quicker than ever before.
Trending searches
El objetivo de esta Norma consiste en establecer las bases para la presentación de los estados financieros
con propósitos de información general, a fin de asegurar que los mismos sean comparables, tanto con los
estados financieros de la misma entidad de ejercicios anteriores, como con los de otras entidades
diferentes. Para alcanzar dicho objetivo, la Norma establece, en primer lugar, requisitos generales para la
presentación de los estados financieros y, a continuación, ofrece directrices para determinar su estructura, a
la vez que fija los requisitos mínimos sobre su contenido
1. Esta norma se aplicara a todo tipo de estados financieros, con proposito de informacion general que sean elaborados y presentados conforme a las normas internacionales de informacion financiera.
2. Los estados financieros con propósitos de información general son aquéllos que pretenden cubrir las necesidades de los usuarios que no estén en condiciones de exigir informes a la medida de sus necesidades específicas de información.
Los estados financieros con propósito de información general comprenden aquéllos que se presentan de forma separada, o dentro de otro documento de carácter público, como el informe anual o un folleto o prospecto de información bursátil. Esta Norma no será de aplicación a la estructura y contenido de los estados financieros intermedios que se presenten de forma condensada y se elaboren de acuerdo con la NIC 34 Información financiera intermedia.
3. Esta Norma utiliza terminología propia de las entidades con ánimo de lucro, incluyendo aquéllas
pertenecientes al sector público. Las entidades que no persigan finalidad lucrativa, ya pertenezcan al sector
privado o público, o bien a cualquier tipo de administración pública, si desean aplicar esta Norma, podrían
verse obligadas a modificar las descripciones utilizadas para ciertas partidas de los estados financieros, e
incluso de cambiar las denominaciones de los estados financieros
3.De forma análoga, las entidades que carezcan de patrimonio neto, tal como se define en la NIC 32
Instrumentos financieros: Presentación (por ejemplo, algunos fondos de inversión), y aquellas entidades
cuyo capital no sea patrimonio neto (por ejemplo, algunas entidades cooperativas) podrían tener necesidad
de adaptar la presentación de las participaciones de sus miembros o partícipes en los estados financieros.
Elementos
Los estados financieros constituyen una representación estructurada de la situación financiera y del rendimiento financiero de la entidad. El objetivo de los estados financieros con propósitos de información general es suministrar información acerca de la situación financiera, del rendimiento financiero y de los
flujos de efectivo de la entidad, que sea útil a una amplia variedad de usuarios a la hora de tomar sus decisiones económicas. Los estados financieros también muestran los resultados de la gestión realizada por los administradores con los recursos que se les han confiado. Para cumplir este objetivo, los estados
financieros suministrarán información acerca de los siguientes elementos de la entidad:
(a) activos;
(b) pasivos;
(c) patrimonio neto;
(a) gastos e ingresos, en los que se incluyen las pérdidas y ganancias;
(b) otros cambios en el patrimonio neto; y
(c) flujos de efectivo.
Esta información, junto con la contenida en las notas, ayudará a los usuarios a predecir los flujos de
efectivo futuros y, en particular, la distribución temporal y el grado de certidumbre de los mismos
1. Un conjunto completo de estados financieros, incluira los siguientes componenentes.
A balance
B cuenta de resultado
C un estado de cambios en el patrimonio neto que demuestre.
D Estado de flujo de efectivo y notas en las que se incluira un resumen de politicas contables, mas significativas y otras notas explicativas.
Muchas entidades presentan, aparte de los estados financieros, un análisis financiero elaborado por la
dirección que describe y explica las características principales del rendimiento y la situación financiera de
la entidad, así como las incertidumbres más importantes a las que se enfrenta. Este informe puede incluir un
examen de:
(a) los principales factores e influencias que han determinado el rendimiento financiero, incluyendo los
cambios en el entorno en que opera la entidad, la respuesta que la entidad ha dado a tales cambios y su
efecto, así como la política de inversiones que sigue para mantener y mejorar el mismo, incluyendo su
política de dividendos;
(b) las fuentes de financiación de la entidad, así como su objetivo respecto al coeficiente de deudas sobre
patrimonio neto; y
(c) los recursos de la entidad cuyo valor no quede reflejado en el balance que se ha confeccionado de
acuerdo con las NIIF.
Muchas entidades también presentan, adicionalmente a sus estados financieros, otros informes y estados,
tales como los relativos al estado del valor añadido o a la información medioambiental, particularmente en
sectores industriales donde los trabajadores se consideran un importante grupo de usuarios o bien los
factores del medioambiente resultan significativos, respectivamente. Estos informes y estados, presentados
aparte de los estados financieros, quedarán fuera del alcance de las NIIF.
Los estados financieros deben presentar fielmente la situación y rendimiento financiero de la empresa, así como sus flujos de efectivo.
La aplicación correcta de las Normas Internacionales de Contabilidad, acompañada de informaciones adicionales cuando sea preciso, dará lugar, en la práctica totalidad de los casos, a estados financieros que proporcionen esa imagen fiel en la presentación.
Toda empresa cuyos estados financieros sigan las Normas Internacionales de Contabilidad, debe dar cuenta de este hecho.
No debe declararse que los estados financieros siguen las Normas Internacionales de Contabilidad, a menos que aquéllos cumplan con todos los requisitos de cada Norma que les sea de aplicación, así como las interpretaciones pertinentes que sobre las mismas haya emitido el Comité de Interpretaciones.
Es la gerencia de la empresa la que debe seleccionar y aplicar las políticas contables, de forma que los estados financieros cumplan con todos los requisitos establecidos en cada una de las Normas Internacionales de Contabilidad y en cada una de las interpretaciones emanadas del Comité de Interpretaciones.
Cuando no exista un requisito específico, la gerencia desarrollará los procedimientos oportunos para asegurar que los estados financieros suministran información:
(a) relevante para el proceso de toma de decisiones de los usuarios;
(b) fiable, en el sentido de que los estados:
(i) presentan la imagen fiel de los resultados de la explotación y la situación financiera de la empresa;
(ii) reflejan el fondo económico de los sucesos y transacciones, y no meramente su forma legal;
(iii) son neutrales: libres de prejuicios o sesgos;
(iv) son prudentes; y
(v) están completos en todos sus extremos significativos.
Al preparar los estados financieros, la gerencia debe realizar una evaluación sobre la posibilidad de que la empresa continúe en funcionamiento.
Los estados financieros deben prepararse a partir de la hipótesis de empresa en funcionamiento, a menos que la gerencia, o bien pretenda liquidar la empresa o cesar en su actividad, o bien no exista una alternativa realista de continuidad salvo que proceda de una de estas formas.
Cuando la gerencia, al realizar la evaluación, sea consciente de la existencia de incertidumbres importantes, relativas a sucesos o condiciones que pueden aportar dudas significativas sobre la posibilidad de que la empresa siga funcionando normalmente, debe revelarlas en los estados financieros.
Salvo en lo relacionado con la información sobre flujos de efectivo, la empresa debe preparar sus estados financieros utilizando la hipótesis contable del devengo.
La presentación y clasificación de las partidas en los estados financieros deben ser conservadas de un periodo a otro a menos que:
(a) se produzca un cambio en la naturaleza de las operaciones de la empresa, o una revisión de la presentación de sus estados financieros, que demuestre que el cambio va a dar lugar a una presentación más apropiada de los sucesos o transacciones, o bien
(b) sea obligado realizar el cambio, por causa de la aparición de una Norma Internacional de Contabilidad o de una Interpretación emitida por el Comité de Interpretaciones
Los cambios en la forma de presentación, para cumplir con la normativa nacional, están permitidos siempre que la presentación revisada sea coherente con las exigencias de esta Norma.
Los estados financieros son el producto que se obtiene del procesamiento de grandes cantidades de transacciones y otros eventos, las cuales se agruparán por clases, de acuerdo con su naturaleza o función.
La etapa final del proceso de agrupación y clasificación consistirá en la presentación de datos condensados y clasificados, que constituirán el contenido de las partidas, ya aparezcan éstas en el balance, en la cuenta de resultados, en el estado de cambios en el patrimonio neto, en el estado de flujos de efectivo, o bien en las notas. Si una partida concreta no fuese material o no tuviera importancia relativa por sí sola, se agregará
con otras partidas, ya sea en el cuerpo de los estados financieros o en las notas. Una partida que no tenga la suficiente materialidad como para requerir una presentación separada en los estados financieros puede, sin embargo, tenerla para ser presentada por separado en las notas.
Es importante que tanto las partidas de activo y pasivo, como las de gastos e ingresos, se presenten por
separado. La compensación de partidas, ya sea en el balance o en la cuenta de resultados, limita la
capacidad de los usuarios para comprender tanto las transacciones, como los otros eventos y condiciones,
que se hayan producido, así como para evaluar los flujos futuros de efectivo de la entidad, salvo en el caso
de que la compensación sea un reflejo del fondo de la transacción o evento en cuestión. La presentación de
los activos netos de correcciones valorativas - por ejemplo cuando se presenten las existencias netas de
correcciones de valor por obsolescencia y las deudas de clientes netas de las correcciones por deudas de
dudoso cobro- no constituirá un caso de compensación de partidas.
A menos que una Norma Internacional de Contabilidad permita o exija otra cosa, la información comparativa, respecto del periodo anterior, debe presentarse:
Para toda clase de información numérica incluida en los estados financieros.
También deben incluirse los datos comparativos en la información de tipo descriptivo y narrativo, siempre que ello sea relevante para la adecuada comprensión de los estados financieros del ejercicio corriente.
En algunos casos, la información de tipo narrativo que se ha suministrado en los estados financieros de los ejercicios anteriores continúa siendo relevante en el ejercicio corriente.
Esta Norma exige que determinadas informaciones se presenten en el balance, en la cuenta de resultados y
en el estado de cambios en el patrimonio neto, mientras que otras pueden incluirse tanto en el cuerpo de los estados financieros como en las notas. La NIC 7 establece los requisitos de presentación para el estado de flujos de efectivo. En esta Norma se utiliza en ocasiones el término “información a revelar” en su más amplio sentido, incluyendo en él tanto la información que se encuentra en el balance, en la cuenta de resultados, en el estado de cambios en el patrimonio neto y en el estado de flujos de efectivo, como la que se desarrolla en las notas referidas a los mismos. Otras Normas e Interpretaciones contienen también obligaciones de revelar información.
Identificación de los estados financieros
de distinguir la información que se prepara utilizando las NIIF de cualquier otro tipo de información que, aunque pudiera ser útil para sus fines, no está sujeta a los requerimientos de aquéllas.
Normalmente, los estados financieros se elaboran uniformemente, abarcando periodos anuales. No
obstante, determinadas entidades prefieren informar, por razones prácticas, sobre intervalos diferentes de
tiempo, por ejemplo utilizando ejercicios económicos de 52 semanas. Esta Norma no impide tal práctica, ya
que es poco probable que los estados financieros resultantes difieran, de forma significativa, de los que se
hubieran elaborado para el año completo.
Cuando la entidad suministre bienes o preste servicios, dentro de un ciclo de explotación claramente identificable, la separación entre las partidas corrientes y no corrientes, tanto en el activo como en el pasivo del balance, supondrá una información útil al distinguir los activos netos de uso continuo como capital
circulante, de los utilizados en las operaciones a largo plazo. Esta distinción servirá también para poner de manifiesto tanto los activos que se esperan realizar en el transcurso del ciclo normal de la explotación, como los pasivos que se deban liquidar en el mismo periodo de tiempo.
En esta Norma, el término “no corriente” incluye activos materiales, intangibles y financieros que son por naturaleza a largo plazo. No está prohibido el uso de descripciones alternativas siempre que su significado
quede claro.
Algunos pasivos corrientes, tales como los acreedores comerciales, y otros pasivos devengados, ya sea por
costes de personal o por otros costes de explotación, formarán parte del capital circulante utilizado en el
ciclo normal de explotación de la entidad. Estas partidas, relacionadas con la explotación, se clasificarán
como corrientes incluso si su vencimiento se va a producir más allá de los doce meses posteriores a la fecha
del balance. El mismo ciclo normal de explotación se aplicará a la clasificación de los activos y pasivos de
la entidad. Cuando el ciclo normal de la explotación no sea claramente identificable, se supondrá que su
duración es de doce meses
En el balance se incluirán, como mínimo, rúbricas específicas que contengan los
importes correspondientes a las siguientes partidas, en tanto no sean
presentadas de acuerdo con el párrafo 68A
(a) propiedades, planta y equipo;
(b) propiedades de inversión;
(c) activos intangibles;
(d) activos financieros (excluidos los mencionados en los apartados (e),(h) e (i)
posteriores);
(e) inversiones contabilizadas aplicando el método de la participación;
(f) activos biológicos;
(g) inventarios;
(h) deudores comerciales y otras cuentas a cobrar;
(i) efectivo y otros medios líquidos equivalentes;
(j) acreedores comerciales y otras cuentas por pagar;
(k) provisiones
. Todas las partidas de ingreso o de gasto reconocidas en el periodo, se incluirán
en el resultado del mismo, a menos que una Norma o una Interpretación establezcan lo contrario.
. Normalmente, todas las partidas de ingreso o de gasto reconocidas en el periodo se
incluirán en el resultado del mismo. Esto incluye los efectos de los cambios en las
estimaciones contables. Sin embargo, pueden existir circunstancias en las que
determinadas partidas podrían ser excluidas del resultado del periodo corriente.
En el estado de resultados se incluirán, como mínimo, rúbricas específicas con
los importes que correspondan a las siguientes partidas para el periodo:
(a) ingresos ordinarios (o de operación);
(b) costos financieros;
(c) participación en el resultado del periodo de las asociadas y negocios
conjuntos que se contabilicen según el método de la participación;
(d) impuesto a las ganancias;
(e) un único importe que comprenda el total de (i) el resultado después de
impuestos procedente de las actividades discontinuadas y (ii) el resultado
después de impuestos que se haya reconocido por la medida a valor
razonable menos los costos de venta o por causa de la venta o disposición
por otra vía de los activos o grupos en desapropiación de elementos que
constituyan la actividad en discontinuación; y
(f) resultado del periodo.
La primera forma se denomina método de la naturaleza de los gastos.
La segunda forma se denomina método de la función de los gastos o método del “coste de las ventas”