Lexicología.
Teresa de jesus luna vargas
Lexicografía.
La lexicografía es la disciplina aplicada al lenguaje que se ocupa de la elaboración y el análisis crítico de diccionarios. Para ello, no solo se sustenta en los principios teóricos y metodológicos de la lingüística, sino que cuenta con los suyos propios. Al igual que la lexicología, posee una dimensión teórica y una práctica.
El término proviene de la técnica realizada por el lexicógrafo, que a su vez proviene del griego leksikográphos, compuesto por leksikós que significa colección de palabras o vocablos de una lengua, y gráphein, escribir. Por lo que corresponde a la técnica de coleccionar palabras que deben entrar en un léxico, o simplemente quien escribe diccionarios. El mismo término alude también al estudio del origen y la raíz de las palabras, y de como constituyen familias dependiendo del idioma del que provengan.
La lexicografía es1 una muy antigua disciplina que busca una sistemática colección y explicación de todas las palabras (o más estrictamente, unidades léxicas) de un lenguaje, pero generalmente en amplitud más que en profundidad, cosa que hace su disciplina hermana la lexicología. Entre estas unidades léxicas no solo se incluyen palabras individuales sino que también modismos, palabras compuestas e incluso morfemas dependientes.
La disciplina lexicográfica no se circunscribe exclusivamente a "compilar diccionarios" sino que también abarca todo un conjunto de análisis de índole teórica en lo que se conoce normalmente como lexicografía teórica2 o metalexicografía.3 Esta disciplina teórica repasa tanto los orígenes de la elaboración de diccionarios, como aspectos relacionados con su estructura formal, la tipología, los métodos de compilación, o los vínculos existentes entre esta y otras disciplinas ya sean lingüísticas o no.
Un diccionario es, según el de la Real Academia de la Lengua Española, "un repertorio en forma de libro o en soporte electrónico en el que se recogen, según un orden determinado, las palabras o expresiones de una o más lenguas, o de una materia concreta, acompañadas de su definición, equivalencia o explicación".
Según José Martínez de Sousa,4 pueden clasificarse según los criterios de soporte (en formato papel o en formato digital), de número de lenguas (monolingües —a cada entrada va asociada una definición— o plurilingües, y dentro de estos bilingües (por ejemplo, un diccionario español-inglés) o multilingües); de ordenación de entradas (orden alfabético u ordenación semasiológica o bien orden sistemático, según temas) y de criterio de la presentación o campo (terminológicos -con la terminología de un determinado campo-, diccionarios enciclopédicos -con información amplia de cada entrada-, diccionarios visuales -con fotografías o ilustraciones que acompañan las entradas- y glosarios).
Para Günther Haensch,5 los diccionarios de carácter general se dividen en cuatro tipos:
Diccionario definitorio. Que ofrece definiciones acerca de cada entrada y un mínimo esencial de información lingüística
Diccionario de uso (incluye, además, sinónimos, antónimos, regímenes proposicionales o ejemplos).
Diccionario didáctico (diccionarios escolares y destinados a hablantes no nativos).
Otro criterio de distinción de diccionarios redunda en su carácter normativo (de palabras correctas) o descriptivo (sin valoraciones: incluye barbarismos, extranjerismos o vulgarismos), y en su carácter sincrónico (que refleja la lengua de un tiempo concreto) o diacrónico (que refleja una evolución del significado y forma de las palabras a lo largo del tiempo); sincrónicos son también los diccionarios de arcaísmos, los de neologismos o los diccionarios de voces de uso actual; diacrónicos los diccionarios etimológicos o los históricos.
ENTRADAS DE UN DICCIONARIO
Las partes de un diccionario se denominan entradas. Cada entrada se divide mínimamente de la siguiente manera:
Lema: la palabra que se va a definir, por lo general, en negrita.
Información etimológica (no aparece en todos los diccionarios).
Morfología o estructura interna de la palabra.
Rango gramatical o clase de palabra.
Acepciones: cada una de las diferentes definiciones que se aportan si es palabra no monosémica, esto es, polisémica, numeradas. Si es monosémica, solo tiene una acepción.
Uno de los puntos fundamentales que trata la lexicología, por lo tanto, es la etimología, o sea, la disciplina que estudia el origen de las palabras de forma individual, tomando en cuenta el momento de la historia en el que surgieron, la forma en la que se incorporaron a cada idioma y los cambios que atravesaron a lo largo de su historia, tanto en su forma como en su significado. Esta rama del saber humano es de gran importancia para mejorar nuestra comunicación y llevar adelante la evolución de nuestra lengua.
Existen numerosos ejemplos de vocablos actualmente usados en el castellano cuyo origen se encuentra en el griego y que antes de llegar a nuestra lengua pasaron por otras, como ser el latín. Por lo general, su paso por tantos contextos históricos y culturales afectó varios de sus aspectos, sino todos: mientras que los más evidentes son los ortográficos y los sonoros, los cambios semánticos son igualmente fascinantes.
Para tratar la etimología, la lexicología se vale de la lingüística histórica. Esta disciplina también se conoce con otros nombres, como ser lingüística comparada, diacrónica o comparativa. Se trata del estudio del cambio que atraviesan los idiomas en el tiempo. Aquí entra en juego el concepto de cambio lingüístico, el proceso de transformación que viven todos los idiomas a lo largo de su evolución histórica, partiendo de sus unidades más pequeñas y llegando a sus niveles más altos.
La LEXICOLOGÍA se relaciona con la semántica en el sentido de que también se ocupa de los problemas del contenido, es decir, se ocupa del significado de las palabras. La lexicología estudia las relaciones que existen entre las palabras de una lengua dada en un momento dado, y aborda el problema entre de la interdependencia que se establece entre la lengua y la sociedad que la utiliza. También se ocupa de problemas de forma (derivación y composición) y contenido semántico.
Lexicologia y semantica
La etimología es considerada una especialidad de la lingüística que intenta dar razón sobre
el significado de las palabras desde sus orígenes.
La etimología contempla la lengua como fenómeno social que es, como algo vivo en incesante
evolución. Es por ello, que indaga el origen de cada voz. Si esta tiene varios significados,
señala cual fUe el primero; explica los fundamentos naturales o los motivos causales de
los significados sucesivos; consigna las alteraciones materiales que ha experimentado
durante su uso y constituye, por tanto, la historia de los idiomas (Leal, Guerra, De La
Garza, Barranco & Balderas, p. 1)
Por consiguiente, hacer investigación etimológica de las palabras ha permitido reconstruir
la historia de las lenguas y de las comunidades que hicieron posible la evolución del
lenguaje desde tres variantes, por un lado, a partir de los significados de las palabras; por
otro lado, desde la clasificación genética; y finalmente, desde el cambio fonético y
gramatical que se han sufrido las palabras. Con la primera, las palabras son entendidas
desde las cualidades y atributos particulares del objeto que las posee, por ejemplo tenemos
LEXICOLOGIA Y ETIMOLOGIA.
Por consiguiente, hacer investigación etimológica de las palabras ha permitido reconstruir
la historia de las lenguas y de las comunidades que hicieron posible la evolución del
lenguaje desde tres variantes, por un lado, a partir de los significados de las palabras; por
otro lado, desde la clasificación genética; y finalmente, desde el cambio fonético y
gramatical que se han sufrido las palabras.
eTIMOLOGIA