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Nacido en Bilbao en 1965, Alex de la Iglesia estudió Filosofía en la Universidad de Deusto. Empieza
desarrollando su talento en el mundo del cómic lo que le abrió las puerta del cine como diseñador y director de arte.
En 1991, dirige el cortometraje Mirindas asesinas, llamando la atención de Pedro Almodóvar, quien produciría su primer largometraje
A través de un enfoque satírico del gore, Acción mutante anuncia el tono de sus obras con personajes marginales, anormales, en contra de la sociedad establecida y mercantilista.
Alex de la Iglesia no oculta su atracción por estos personajes
El padre Ángel y el joven José María, una especie de Don Quijote y Sancho Panza luchando contra molinos de viento, ilustran los problemas de la España contemporánea denunciando los síntomas de la modernidad española: el surgimiento del magnate de la comunicación Berlusconi con Tele 5, la juventud nihilista inmersa en el mundo de las drogas, el demencial desarrollo urbano, los grupúsculos fascistas…
En 2004 Alex de la Iglesia vuelve a obtener un gran éxito de público con Crimen ferpecto, una película de humor negro y fantasía.
Ganadora del Festival de Cine Español de Bruselas
Probablemente una película más personales que ha dado el cine español en los últimos años, Balada triste de trompeta, es el filme más suicida de Alex de la Iglesia y un precioso díptico sobre las dos Españas.
Con un impactante arranque, la película fluctúa luego entre los momentos de gran cine y el disparate freak.
Alex de la Iglesia se llevó el León de oro de la Mostra del cine de Venecia al mejor director y mejor guion.
Su argumento es apenas una premisa: durante semanas un grupo de técnicos, extras, cantantes y animadores graban en un estudio un especial de año nuevo y no se pueden ir. Todos vestidos de gala, sonrientes, glamurosos, fingiendo pasarlo genial.
Referencias cinematográficas
La fiesta de Nochevieja
David Bisbal