Loading…
Transcript

Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará

Mar 8.35

de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.

Heb 13.6

El Verdadero Evangelio

De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.

"Mi vida es y ha sido demasiado dura"

Juan 12.24

...contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré

Heb 13.5

Yo fui hecho por Dios para amar. Esa es la razón de mi exitencia. Debo dejar de "lamer mis heridas" para poder amar a otros. El evangelio me exige morir a las demandas de mi "yo". Esto solo es posible cuando me concentro en las necesidades de otros.

No debo quejarme de la vida que me ha tocado. Muchos han tenido una vida mucho más dura que la mía. Mi situación es parecida a la de muchos otros. !Y el Señor está hoy conmigo!

Esto, pues, digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su mente, teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón

Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración. Y ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados.

1 Pedro 4.7-8

Efe 4.17-18

Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.

1 Cor 2.16

Finalmente, sed todos de un mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables; no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición.

1 Pedro 3.8-9

Al sentirme ofendido

El Evangelio debe cambiar nuestra mente

Efesios 4.23: y renovaos en el espíritu de vuestra mente

con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor.

Efe 4.2

Nuestra mente egocéntrica debe volverse una mente que ama. Si nuestros pensamientos egoístas siguen impulsando nuestra manera de sentir y actuar, no hemos realmente abrazado el evangelio.

¡Ahora reconozco que la razón para que me haya sentido insultado es el alto concepto que tengo de mí mismo! Si yo fuera manso y humilde como el Cordero de Dios, estos conflictos no me

afectarían.

soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.

Col 3.13

La cordura del hombre detiene su furor, Y su honra es pasar por alto la ofensa

Prov 19. 11

"No merezco tanto maltrato"

Centrados En Otros

La Naturaleza de Dios: DAR

Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.

Mat 5.7

¿Realmente he tratado de entender por

qué esta persona ha reaccionado así? ¡No

debería tomar su reacción tan personalmente!

Probablemente está pasando por dolor o tal vez

está preocupada por algo que no tiene nada que

ver conmigo! ¡Seguramente yo mismo hice alguna cosa que provocó su reacción!

Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.

Lucas 6.36

Juan 3:16 - … de tal manera amó Dios … que dio.

Marcos 10:45 - Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido,

sino para servir, y para dar su vida.

Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.

Efe 4.32

"Todos piensan mal de mí"

Mateo 20:26 - el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro siervo.

Romanos 15:3 - Pues aun Cristo no se agradó a sí mismo.

Pensamiento: "No merezco esto"

Reconozco que necesito sobreponerme a mis imaginaciones. (Ej: La gente no no está pensando mal de en mí. Ellos están pensando en otra cosa).

Hechos 20:35 - Más bienaventurado es dar que recibir.

Tengo tantas razones para estar agradecido. No soy digno de las bendicones que hasta hoy he recibido de Ti, Dios no me ha dado el castigo que merezco. Dios me ha dado bendiciones disfrazadas en cada injusticia que he sufrido.

No ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados.

Sal 103.10

"Qué bien le vendría esta palabra tal o cual"

Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo.

Gen 50.20

porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,

derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,

Lo que este hermano está diciendo no es para otros, es para mí. Debo recibirlo yo mismo.

2 Cor 10.4-5

Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. De manera que la muerte actúa en nosotros, y en vosotros la vida.

2 Cor 4.11-12

Nadie puede comprender lo que a me pasa

"Nadie me reconoce"

"Nadie me Quiere"

Esto que estoy leyendo es para mí. Dios me está hablando a mí.

Yo sé que mis problemas no son extraordinarios. Cada quien tiene pesares. ¡Señor ayúdalos!

Gloria de los hombres no recibo.

Juan 5.41

Debo rechazar mi actitud de

“Nadie me ama.” ¿Qué he hecho hoy

para mostrar amor a los demás? Hay

muchas personas solas y frustradas a

mi alrededor que necesitan ser

animadas. Úsame, Señor.

No preciso el elogio de otros. Señor, yo sé que no merezco nada. Yo escojo estar agradecido por todo. Yo fui creado para agradarte. No buscaste el elogio de los hombres, ni yo lo haré.

no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros.

Fil 2.4

ni buscamos gloria de los hombres; ni de vosotros, ni de otros

1 Tes 2.6

Porque todos buscan lo suyo propio, no lo que es de Cristo Jesús

Fil 2.21

No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.

1 Cor 10.13

Porque amaban más la gloria de los hombres que la gloria de Dios

Juan 12.43